
Acoso psicológico, locura inducida, mania persecutoria...
Bombis y Borombis no cesan en su empeño de hallar a Nino en este vasto territorio mundial.
La última huella del travieso personaje les ha llegado a través de un extraño mensajero. En su cara se dibujaba el rostro del Nino con una pícara sonrisa.
Bombis y Borombis no salen de su asombro.
Acongojadas han descubierto en la nueva entrega, una nueva representación del Nino en la Terra Inteira. Esta vez una pieza sólida de madera, única, a modo de colgante.
¿Conseguirá el intrepido personaje volver a las pobres Bombis y Borombis majaretas?