Bombis y Borombis observaban la intranquilidad del sueño de Nino.
Había llegado al taller, después de tantos kilómetros recorridos tras la pista de Nina, exhausto.
Llevaba dormido prácticamente un día entero.
Llevaba soñando prácticamente un día entero.
Le oyeron balbucear el nombre de Nina por enésima vez y un obstinado "somos una intersección de conjuntos, mi dulce Nina, una intersección... somos una intersección de conjuntos, mi dulce..."
Ay qué bonito!
ResponderEliminarMe encanta, qué bonito!
ResponderEliminarPrecioso, chicas...
ResponderEliminar:)*
Ohhh que bonita intersección...
ResponderEliminarBesitos
Perfecta esta intersección.
ResponderEliminarPetons
Qué bonito. Qué claro.!!
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ResponderEliminarMe encanta! Un concepto precioso!
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