31 agosto, 2008

Aterrizaje

Cientos de dedos señalaron al aire al ver aparecer el dirigible tras los edificios que custodiaban la plaza.
- ¡Allí, allí! ¿Lo ves?- gritaban los padres a sus hijos.
- ¡Ese chico llegará agotado! – comentaban las madres.

Para casi todos era el primer zepelin que veían.
También para Bombis y Borombis, aunque su entusiasmo partía de otro motivo: por fin iban a ver a Nino. Tenían tantas preguntas que hacerle, tantas historias que escuchar, tal vez alguna confesión... los pensamientos se atropellaban dentro de sus cabezas: el taquillero, las cuestiones diplomáticas, el circo y Nina
La gente se agolpó alrededor de aquel globo en cuanto tocó tierra. Su aterrizaje había sido algo turbulento, parecía que nadie comandaba el aparato.
Bombis y Borombis se abrían paso entre la gente; les resultaba dificil adelantar apenas algunos pasos. Diez minutos, tal vez quince, tardaron en llegar a primera línea y entonces tan sólo alcanzaron ver cómo una ambulancia que había encendido su sirena minutos antes, se alejaba.

- Pobre muchacho, estaba exhausto ahí estirado en la cesta. ¡Qué pálido! A saber cuánto tiempo habrá tardado en llegar aquí con ese trasto – escucharon decir a una mujer que estaba junto a ellas.
No, otra vez no. Nino estaba en aquella ambulancia, y San Petersburgo era tan grande…

18 comentarios:

  1. a ver,a ver si nos podemos conocer mejor dentro de poco a Madrid.Me haria mucho ilusión.

    ResponderEliminar
  2. ains... que angustia... este chico no pelecha...

    ResponderEliminar
  3. escurridizo nino.

    ..
    de vuelta
    da gusto volver a leer vuestras historias!

    ResponderEliminar
  4. Oh !! pobre nino.... espero que no sea nada y con un buen chute de suero se reponga para seguir buscando a su nina.

    Pobre de vosotras os va a tocar seguir viajando por una ciudad preciosa en busca de este renacuajo.

    Teneis un e-mail pendiente de contestarme cuando podais ya sabeis vale ??? :D

    Besitosssss

    ResponderEliminar
  5. nOooo, no puede ser!
    espero que esté bien (esté donde esté)

    _besos

    ResponderEliminar
  6. Pero pobre Nino! (creo que siempre digo lo mismo, pero es que lo que no le pase a él...) Hay que tener cuidado con los zepelines, que ya se sabe que tienen un puntito de maldad...
    un beso!

    ResponderEliminar
  7. Si es que ya se sabe, cuando coge un zepelín..... y no suele ser de suero precisamente;)

    Un besito, y gracias por vuestra visita:))

    ResponderEliminar
  8. Yo digo como espita gorgorita:
    ainsss qué angustia, qué vida!

    ResponderEliminar
  9. un 10 para vuestro blog, para vuestras crecaiones, vuestras historias, y por supuesto, PARA VOSOTRAS!!
    Un besazo!!
    =)

    ResponderEliminar
  10. Dios mío! otra vez no!!!!!!
    Cuántos hospitales debe haber en St. Petesburgo?
    yo estuve hace unos años y es una ciudad enorme!!!
    Coged la maleta antes de que se la lleve nadie!!!!

    ResponderEliminar
  11. ¡¡Hola chicas!!

    Ay,que angustia da eso de nunca alcanzar aquello que persigues...
    Pues habrá que mirar cuantos hospitales hay,¿¿no??

    P.D.:Aún me teneis alucinadita con vuestro post sobre mí ^^.

    ¡¡Mil achuchones!!

    ResponderEliminar
  12. Ay! que no le vamos a pillar nunca? Espero que no haya sido nada, aunque me parece a mi que este tiene más vidas que un gato!

    besos!

    ResponderEliminar
  13. Uno no hace un viaje como ese para despues no recuperarse.


    Animo nino.

    ResponderEliminar
  14. Tranquilas amigas, porque este travieso personaje se las sabe todas y es verdad, tiene más vidas que un gato o tal que él, siempre cae de pie.

    ResponderEliminar
  15. creo que nino se equivocó de medio de transporte, pero espero que se recupere pronto para seguir en la búsqueda...

    besos guapas

    ResponderEliminar
  16. Hola! Claro que nos veremos en Minimadelia! ya hablaremos por mail para quedar!! Os cuento que ayer iba yo toda contenta a coger una ilustración Bombis y Borombis, me puse a hablar con Laura Valea y cuando volví a mirar a la pared las 4 tenían el punto rojo de vendidoooooooooooooooo, horror, me quedé sin ellas :((( Volaron!!
    La expo está fantástica, comprasteis algo? enseñad, enseñad!!

    ResponderEliminar
  17. Pues es que fue un visto y no visto, puede que se llevara las cuatro la misma persona, porque en un momento no había puntos y yo allí delante decidiendo cuál coger, cosa difícil porque eran las cuatro chulísimas, y en el ratito que hablé con Laura aparecieron los puntos como por arte de magia!!
    Llovía? el viernes hacía un viento horrible, pasé un frío espantoso y casi me vuelo :))
    Hablamos para encontrarnos!

    ResponderEliminar
  18. Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.

    ResponderEliminar

NINOS

Y Ninos apareció en nuestro taller, revolviéndolo todo: el orden, los colores, las ideas, el tiempo.
Y no había hecho más que empezar...